miércoles, 24 de abril de 2013

Vencido el no al examen de ingreso

Las pruebas a las que tienen que someterse los interesados para el ingreso a las universidades en nuestro país, parece que vencieron al nada querido examen de ingreso, que hace unos sesenta años era requisito para ingresar a los centros de educación superior, y lograr que no se de paso al requerimiento, consideraron un triunfo, la conquista de luchas, de serios enfrentamientos con la autoridad tanto interna como externa de dichos centros.
La mayoría de la república no estaba de acuerdo con tal medida, calificada de conquista de la lucha popular organizada y democrática, porque veía primeramente una aglomeración injusta tanto para la sociedad como para la comunidad nacional que, por cierto, reflexionaba en el sentido de que se daba paso a la mediocridad de futuros profesionales. Junto a esta postura, para mala suerte de las universidades y del país, partidos políticos un tanto extremistas estaban insertos en los estudiantes y favorecían el facilismo para las notas y graduaciones.

Resultado de todo esto es que en efecto se dio un retroceso a la calidad de los egresados de las universidades. Además, por cierto muy doloroso, los maestros se veían obligados a someterse a esta tendencia que llevaba consigo la baja calidad de los profesionales. Súmese a ello que ingresaban como profesores los recién graduados, por cierto, pertenecientes a los enquistados partidos.
Romper todo esto, por cierto convertido en sistemas y visto como lo más natural, y que hacía mal a la educación superior del país, y por tanto al desarrollo de los mismos profesionales y del país en su gran conjunto. Contrastaba con la educación que se daba en las universidades no estatales.
Creemos que todos estos peros se están superando con los exámenes y pruebas que se les demanda a los aspirantes a las diversas facultades y a los muchos centros de educación, puesto que aun los centros educativos superiores, ante la presión y el no facilismo que gusta el conceder títulos sin bases sólidas, la obligación de someterse a tales pruebas, se mantenga y no se de paso, en cambio, a la acción de los partidos y tendencias distintas a esta exigencia.
http://www.elheraldo.com.ec/index.php?fecha=2013-04-22&seccion=Editoriales¬icia=25772

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